El Constitucional ha admitido la reclamación de la Generalitat de Cataluña para permitir el autoconsumo colectivo. La decisión anula el apartado del Real Decreto 900/2015 que prohibía “que los generadores puedan conectarse a la red interior de varios consumidores”.
De este modo, al suspender esta prohibición, se abre la puerta a la implantación de instalaciones comunes de autoconsumo en urbanizaciones o edificios comunitarios, contribuyendo también a un cambio hacia un modelo energético sostenible e independiente.